España remonta la ventaja inicial de Portugal y se lleva la Euro en los penaltis gracias a una estelar Silvia Aguete (Foto: RFEF).
El partido empezó espeso, falto
de ritmo y España apareció desnaturalizada. La defensa férrea de Portugal y el
nivel físico de su juego se le atragantó al equipo de Claudia Pons que no era
capaz de generar casi peligro. En los primeros minutos un error en la salida de
Peque da a Portugal la primera oportunidad a Ana Azevedo que se encuentra con
Silvia. Justo a continuación la misma capitana portuguesa vuelve a tener un uno
contra uno y de nuevo Silvia salva a España.
España apenas llegaba y Portugal
se adelanta tras un error de Irene Córdoba que propicia la contra de Portugal.
Fifo cede a Ana Azevedo que esta vez no falla y marca el primer gol en contra
de España en la historia de las fases finales europeas femeninas. España no
cambia de intensidad, sigue sin ritmo de pelota y tampoco es capaz de superar a
las portuguesas en las jugadas individuales que se empeñan en ejecutar. A falta
de cinco minutos María Sanz gana la espalda a la defensora pero no puede salvar
la salida de Ana Catarina.
Portugal está más cómoda, el
juego duro al borde del reglamento de Fifò y Carla Vanessa permitido por un
arbitraje mitad casero mitad vergonzante por su baja calidad hacía que España
no encontrara su juego. Esto se traduce en un segundo gol en un saque de banda
tan bien ejecutado por las lusas como mal defendido por las españolas a falta
de poco más de minuto y medio para el descanso. Sin embargo, el espíritu competitivo
de las nuestras sale a relucir. Ale de Paz revienta el balón suelto desde 15
metros y Ana Catarina no es capaz de atajarlo.
La sensación al descanso es que
España salía viva de una primera parte cercana al desastre.
En la segunda parte la sensación
es distinta. España empieza a utilizar un tres - uno más claro y eso les
permite sacar el balón con más comodidad, gracias sobre todo al buen empleo en
el pívot de Dani y en menor medida de Irene Córdoba. Eso hace que España
consiga llegar más pero aun sin el peligro necesario para equilibrar el
encuentro.
En esos minutos Inés tira a la
escuadra de Silvia y acto seguido Mayte lanza un gran golpeo al larguero
portugués. A falta de seis minutos Ale de Paz de nuevo desde la larga
distancia, esta vez tras un rebote vuelve a poner el balón en la escuadra de
Ana Catarina para establecer el momentáneo empate a dos. Pese a que las
portuguesas se emplean con mucha más fuerza son las españolas las que llegan a
la quinta falta y antes de que se termine el tiempo reglamentado las lusas
tienen dos oportunidades de transformar dos diez metros a los que Silvia
reaccionó para salvar la ventaja de las anfitrionas. Nadie arriesga y se llega
a la prórroga.
La prórroga se sigue más o menos
por los mismos derroteros que la segunda parte. España controla más el juego y
llega más a menudo, pero Portugal no deja de salir con peligro. A falta de poco
más de un minuto María Sanz tira desde fuera y Ana Catarina falla al intentar
despejar y se cuela en su portería. España se pone por delante con toda la
segunda parte de la prórroga por delante. En esa segunda parte aún hay otro
diez metros, esta vez lanzado fuera por Pisko.
España aguanta y Portugal no
tiene más remedio que sacar el juego de cinco. Y le funciona a falta de un 1:16
para el final. Pisko resuelve una buena jugada de superioridad del conjunto
portugués y empata el partido y aplaza la decisión del campeonato a los
penaltis.
Y en los penaltis no hubo
historia. No sé si atenazadas por el nerviosismo o la responsabilidad, o quizás
porque Silvia Aguete se empeñó en recordarnos que es lo más parecido a Luis
Amado que ha habido en el futsal femenino, las portuguesas solo fueron capaces
de acertar una vez de las tres que lanzaron mientras que las españolas hicieron
pleno con el decisivo cuarto lanzamiento de Irene <córdoba que daba a España
el segundo título europeo y la seguridad de que el relevo generacional está
garantizado.
La UEFA se empeñó en tirar por
tierra el prestigio del MVP dándoselo a Ana Azevedo. Pero siempre sabremos que
la jugadora más importante de este campeonato fue Doña Silvia Aguete, y eso no
lo va a poder cambiar la UEFA ni Cristo que lo fundó.
Francisco Sánchez Tortosa