"Una final no se merece, se logra"
El Barça bien merecía llegar a la tan ansiada final en Munich, por juego, clase, elegancia, valores, cantera, entrega, calidad y sobre todo, y ante todo, por FÚTBOL. Pero lo dicho, aunque suene duro, una final no se merece, se ha de lograr. Sin más. Y el rival, sin merecerla, la ha logrado.
Con un
"antifútbol" que sobrepasa los límites del propio deporte y con un
estilo indigno de cualquier espectador, sea del equipo que sea, que quiera ver
un buen partido de fútbol. Pero todo estilo vale, señoras y señores. Y este
mismo estilo a lo "catenaccio" más puro e insultante al mismísimo
deporte nos ha apeado de Munich y ya nos dejó fuera de otra final en el
Bernabeu, cuando Mourinho dirigía al Inter, con expulsión por aquél entonces
del ex blaugrana Mota y un guión muy parecido al de ayer. Por todo ello, el
Barça siempre fiel a su estilo de jugar y crear no debe sentirse ahora mismo
desdichado. Hizo lo que tenía y sabe hacer. Pero ayer la suerte no acompañó en
absoluto y fue clave en la eliminatoria. Por eso mismo, una Final no se merece,
se logra.
La verdad es que hoy se me hace difícil argumentar, redactar o entender por qué el Barça está fuera y el rival tiene el billete a Munich. La razón, que todo lo entiende con lógica y causa - efecto, lo de ayer no lo puede procesar, porque no tiene lógica ni sentido común. Simplemente: Es. Pero precisamente eso es el fútbol, injusto muchas veces y una sin razón total, como ayer. El Barça salió a tope sabiendo que un gol tempranero empataba la eliminatoria, dejando todo abierto en casa para rematar la faena. Pep salió con todo el arsenal y fiel a estilo Barça, como siempre. Y aunque el Chelsea montó el autobús, el portaviones y todos los tanques atrás, es decir, jugaron a algo así como : 5 - 5 - 1 (sin exagerar), el Barça lo intentaba por todo resquicio o hueco posible. Pero era imposible penetrar aquella fortaleza inglesa, tan indigna para el propio fútbol y la competición, como efectiva. Pasaban los minutos y el Barça necesitaba, al menos, un gol que pusieran en tablas a los de Guardiola. Se intentaba de todas las maneras, con chute exterior, desde las bandas, con algún córner que otro, faltas....pero estos del Chelsea saben perfectamente jugar al "no - jugar", por lo que son expertos consagrados. O sea, todo lo contrario que el Barça, que sí ama este deporte de la mejor forma posible, jugando. El Chelsea dejaba abandonado a su suerte al único punta, que más que atacar defendía, Drogba, por si alguna pedrada de su portero, Cech, la podía cazar y sacar algo. Hecho que le salía bastante bien al equipo inglés, ya que todo hay que decir, tienen en su portero y en el marfileño, a dos enormes jugadores de una calidad extraordinaria. Pero llegó el gol soñado en el 35 del primer tiempo para el Barça. Un hueco milimetrado que Cuenca encontró por la banda izquierda y que centró a la perfección y que Busquets, a punto con su pierna buena empalmó dentro de la portería de Cech. El Camp Nou explotó de emoción y el fútbol empezaba a hacer justícia a tal sufrimiento inmerecido hacia los que querían jugar.
Tal
fue el mazazo al Chelsea ese gol, que su capitán y veterano Terry, se
autoexpulsó con una acción verdaderamente lamentable para todo público que ama
este deporte. Desquiciado por el devenir del partido y por el partidazo que
Alexis le estaba marcando, perdió los
papeles dándole una patada en la espalda al chileno, sin venir a cuento y sin
balón, que el quinto árbitro no pasó por alto y supuso la roja directa para el
inglés. Un error que dejaba a su equipo con 10, a falta de jugar la segunda
mitad y que, en caso de que su equipo llegara a la Final , él no la disputaría
(posiblemente su última oportunidad de jugarla). Error y poco digno de un
jugador de la talla de él, que le dejó en una triste evidencia.
Y
llegó el que parecía el nuevo "Iniestazo" y el gol que marcaría un
antes y un después en la eliminatoria, en el 44, Iniesta de nuevo, el héroe de
Stamford Bridge hace 3 años, marcó el 2 - 0 a pase magistral de Messi, y batió
a Cech con un chute raso y contundente. El Camp Nou estallaba en ilusión y
júbilo, sintiendo que la justícia empezaba a teñirse de blaugrana. Pero duró
poco. Igual que ante el Madrid tan sólo 3 días atrás después del empate, otra
aislada contra aparentemente inofensiva, iniciada por Lampard a pase largo,
cazada por el rápido internacional brasileño Ramires, se plantó ante Valdés en
dos pases y con un globo perfecto, en el descuento de la primera mitad, supuso
el gélido 2 - 1 en el marcador. Otra vez lo mismo, señoras y señores!!. Como en
la ida de Stamford Bridge y como en casa ante el Madrid....Se llegaba al
descanso.
En
la segunda mitad el mensaje de Pep fue claro: "Hay que darle la vuelta a
esto como sea". Y el Barça lo intentaba, pero si el Chelsea ya salió a
defender a capa y espada el 0 - 0 inicial, imagínense cómo salió en la segunda
parte con la ventaja en la eliminatoria y un jugador menos. Nunca antes había
visto nada igual en un partido de ¿fútbol?. Como gato panza arriba, con uñas y
dientes y rechanzado todo balón que llegaba a las cercanías del área. Así los
45 minutos del equipo ingles, mientras que el Barça, apremiado por el
resultado, iba con todo. Los culés lo intentaban por las bandas, por el centro,
por aire, de córner....era un muro infranqueable. Hasta Drogba renunció a
cualquier síntoma de ataque!!..Fruto de ello y de su inexperiencia en esas
posiciones defensivas, cometió un penalty clarísimo sobre Cesc, señalado por el
colegiado y que volvió a hacer soñar a un Barça que sólo le faltaba eso: el
gol. Messi era el encargado de lanzarlo pero....ahí todo el barcelonismo
entendió que el Barça no pasaría a la Final. El chute se estrelló en el poste, dejando
a un Barça tocado y a un Messi desconsolado por el clave error. El Chelsea
volvió a coger aire y a sentir que aún estaban vivos a pesar de los pesares,
justa o injustamente. Pero estaban en la Final. Aún más defensa para mantener como fuera
aquél resultado, y el Barça. después de unos minutos de lógico desconcierto,
reaccionaba con ocasiones de un gran Alexis y de Cuenca por las bandas. De Xavi
y de un Messi, que aún afectadísimo por el error, tuvo un palo en los minutos
finales del partido. Pero no era la noche del Barça ni el destino quería que el
equipo de Pep fuera a la Final
de Munich.
A
pocos minutos del final, Di Matteo hace su último cambio y entra Torres por el
incombustible Drogba. "El Niño", que tan horrible campaña está
haciendo con los "blues" pero que tan y tan bien se le ha dado
siempre marcarle al Barça. Mientras que los chicos de Pep tuvieron más
ocasiones, era un ataque - gol contínuo de los blaugrana, con gol de Alexis
anulado por fuera de juego en el 81, que hubiese sido el nuevo héroe culé. Pero
todo era la cruz de la moneda. Y de nuevo, otra vez la misma jugada. De la
nada, en el descuento de la segunda mitad, esta vez Torres, el recién salido y
al que habíamos citado antes, marca el 2 - 2 y definitivo en una contra maldita
en la que se queda solo ante Valdés. Acto seguido, el colegiado señala el final
y el Barça en casa se queda fuera de la Final de Munich. De una merecida final que no ha
podido conquistar, en detrimento de un raquítico y triste anti - fútbol del
rival, que venía con hambre y ganas de revancha. Incluso algunos
"blues" decían : "para hacer justícia por lo que nos han robado
años atrás", que yo me sigo preguntando ¿Y quién les ha robado qué?. ¿Un
gol de Iniesta totalmente legal y brutal, aunque jodidamente doloroso para
ellos en su momento(con perdón)?.... No lo dudo, como lo doloroso que ha sido
ver al Barça ayer quedar fuera por la misma razón. Pero ¿justícia por todo lo
robado?....Permítanme que siga sin entender nada. Invito a todo aquél que
quiera que me lo explique, por favor.
Lo
más precioso de la noche, si podemos sacar algo de positivo, fue ver y escuchar
a todo un Camp Nou, cantar el Himno , aplaudir al equipo y corear el nombre de
Messi cuando éste rompía a llorar por haber fallado el que él sabe que era el
gol que daba el pase a su equipo. Esa imagen y ese sonido de fondo, justamente
al acabar un partido en el que te acaban de eliminar, fue verdaderamente
precioso!!. Digan lo que digan de la afición del Barça, el gesto de ayer hacia
el equipo fue digno de admiración y resaltado por toda la prensa mundial, que
también hizo valer la famosa frase de:
"No siempre gana el mejor". Pero este Barça , aunque muchos ya dicen
eso del "fin de ciclo", tiene cuerda para rato. Esta temporada la
mala suerte de palos y falta de puntería nos ha hecho estragos y se ha de
solucionar, obviamente. Pero si alguien duda de este equipo, por favor, que me
explique por qué. Quizás se nos olvida que no siempre se puede ganar. Y de
hecho, lo extraordinario de este Barça es que durante mucho tiempo no ha hecho
otra cosa que ganar. Por eso pasarán a la Historia estos chicos.
Terminaré
la difícil crónica de hoy, haciendo un apunte que he reservado para el final
sobre el estado de Piqué, sustituído por Alves en el 25 de la primera mitad por
un fuerte choque de trenes entre Drogba y Valdés que le dejó semi inconsciente
pero que está fuera de peligro, aunque estará una semana de reposo. Un Piqué
cuestionado por muchos también por sus ausencias en el once titular y que ayer dejó claro que cuando
está , sale a tope.
Ha
sido un duro golpe, amig@s culés. Es innegable. Pero no hemos de olvidar todo
lo que nos ha dado y nos puede dar este equipo. Y dentro de la derrota más
injustificada y sin razón, hemos de pensar que "el que no arriesga, no gana".
Y el Barça siempre arriesga porque quiere jugar. Ganará o perderá, pero siempre
quiere jugar y desprende admiración por ello. Otros no juegan, por lo tanto, no
arriesgan. Y puede que así ganen, como ayer. Es otra visión de llegar al
objetivo. Mísera, rácana y antideportiva si me apuráis, pero válida. Pero sea
como sea, y sabedora del resultado, voy a decir una cosa que quizás algunos
compartan conmigo y otros no. Hoy, después-de, esta mañana y más en frío que
nunca, no cambiaría ni un minuto de juego, de valentía, de emoción, de
jugadores, de entrenador, de filosofía ni de fútbol de este Barça por ninguna
Final de Champions, título o trofeo en las vitrinas. Es el ADN Barça de ayer,
de hoy y de siempre, y estoy completamente orgullosa. Hoy más que nunca, FORÇA
BARÇA!
MONTSE CANYETE
FC Barcelona: Valdés; Puyol, Mascherano, Piqué, Busquets, Xavi, Iniesta, Fàbregas (Keita, min. 73), Cuenca (Tello, min. 67), Alexis, Messi.
Chelsea FC: Cech, Ivanovic, Terry, Cahill, Cole, Mikel, Meireles, Ramires, Lampard, Mata (Kalou, min. 57), Drogba (min. 80 Torres).
GOLES: 1-0, min.35, Busquets, 2-0, min. 44, Iniesta, 2-1, Ramires, min. 45, Torres, min. 90.
ÁRBITRO: Cüneyt Çakir (TUR). Amonestó a Mikel (min. 31), Terry (min. 36), Messi (min. 69), Lampard (min. 71), Meireles (min. 88)
INCIDENCIAS:
Partido correspondiente a la vuelta de semifinales de la UEFA Champions
League entre el FC Barcelona y el Chelsea FC diputado el martes 24 de abril de 2012 en el estadio Camp Nou de
Barcelona ante 98.500 espectadores.
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