sábado, 29 de abril de 2017

El primer empate de la temporada propicia el descenso de Pescados Rubén Burela

Pescados Rubén Burela 4-4 Levante UD FS | No fue suficiente el primer empate de la temporada para la permanencia de los de Tomás de Dios. Sus paisanos santiagueses ayudaron puntuando en Cartagena, pero el gol que hubiese supuesto la salvación no llegó en Vista Alegre. Los de A Mariña descienden a Segunda División tras cuatro temporadas en la élite.


Foto: Pepa Losada (La Voz de Galicia)

Los asistentes a un repleto Pabellón de Vista Alegre pudieron comprobar que lo que bien empieza no siempre bien acaba. Y las cosas no podían comenzar mejor para Pescados Rubén Burela, solo 22 segundos de juego y gol inaugural de Jose Carlos. Quizás el tiempo muerto más rápido de la historia, el que pidió David Madrid a renglón seguido, indicaba que los granotas no lo iban a poner nada fácil. Nadie lo diría sin embargo cuando, en el minuto seis, Iago Rodríguez abría la renta con el 2-0 ante el júbilo de la parroquia naranja.

Pero las emociones, como sucedió a lo largo de la intensa noche, darían un inesperado primer vuelco. Solo siete minutos necesitó Levante UD FS para remontar el choque. Lucas Tripodi redujo distancias y Emilio Buendía, con sus dos primeros tantos de su precoz hat trick, volteaba el luminoso. Cuando todo indicaba que ambos conjuntos llegarían al descanso con el 2-3, José Carlos igualó el encuentro tras culminar una rápida contra. Ni un minuto duró la alegría y Buendía, que completaba su triplete, mandaba el choque con 3-4 al intermedio.

Tras el paso por vestuarios los gallegos, obligados por la situación, salieron apretando a su rival desde el inicio con Matamoros guiando sus ofensivas. Iago Rodríguez había estrellado un balón en el larguero, la igualada no llegaba y los valencianos, muy peligrosos a la contra, amenazaban al meta Edu una y otra vez con un gol que pondría las cosas muy complicadas a los locales. No fue hasta el minuto 34 cuando Antoñito volvía a hacer creer con la victoria a su afición y subía el 4-4 que, a la postre y para desgracia burelense, sería definitivo.

Los últimos instantes fueron absolutamente dramáticos. Las noticias que llegaban de Cartagena eran esperanzadoras,  pues los vecinos compostelanos habían empatado y, con el partido ya concluido, todo quedaba a merced de lo que sucediese en la otra punta de la península. Un gol mariñano suponía la permanencia en la élite. A pesar de que Lucho, como buen lucense, puso de su parte al ser expulsado, sus paisanos no aprovecharon la superioridad. Tampoco llegó el tanto con portero jugador y Burela consumaba su descenso a Segunda cuatro temporadas después.

Fer Romero de Paz (@FerRomeroDP)

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